Quisiera compartir con ustedes los logros obtenidos en el tratamiento de un caso de discalculia post infección covid-19.
Lucy, 48 años. Nacida en San Isidro, se radicó en EEUU hace uno 20 años. Allí realizó los estudios de doctorado en psicología y psicoanálisis, se desempeña como psicóloga clínica y forense.
Motivo de consulta:
Discalculia. Pérdida de concentración y de la capacidad imaginativa. Se percibe más lenta para realizar abstracciones y también comenta que “se le pierden las palabras” lo que interfiere en el avance de la escritura de una novela.
En la indagación de los síntomas asocia la discalculia con el fallecimiento del padre el año pasado, tiempo antes de la infección por covid. Al respecto menciona sentir que perdió sus referencias “gran parte de la identidad es ser hija de… “. Menciona que no puede avanzar en la escritura de una novela y recuerda que eran sus padres quienes leían los avances y que pese a estar casada, no encuentra en EEUU con quién compartir sus escritos. Sobre su vida allá dice sentirse en modo supervivencia, haciendo grandes esfuerzos para adaptarse. De su relato se desprende que su lado más expresivo, sensible quedó en Argentina, y allá funciona de manera más pragmática, racional.
Formulación de la meta:
Expresa querer “sacudir el polvo de la cabeza”, despertar la creatividad y salir del modo supervivencia. Sintetiza la meta en “despertar e integrar”
Se imagina avanzando en los capítulos de la novela con fluidez.
Aplique el protocolo de RDL, sus movimientos se ven rígidos y con poca amplitud articular. Al hacer los chequeos profundos se observa tanto en marcha cruzada como en la unilateral estar en modo desintegrado.
Realizamos la lista de aprendizaje de la lateralidad y añadimos algunas actividades de alargamiento (búho, activación de brazo y flexión de pie). A medida que avanzaba en los ejercicios, sus movimientos fueron tomando fluidez y el gesto en su rostro se suavizó. Al finalizar manifestó sentirse relajada.
En las actividades posteriores al mirar la X responde en cambio alto integrado y en las paralelas en cambio bajo integrado. Sobre su meta dice “siento que se abrió un camino”.
Esa misma noche me escribe desde un recital al que había concurrido “Luego de verte y en este bullicio encuentro el camino”
A la semana siguiente tuvimos un encuentro para evaluar los avances. Refiere que la noche posterior a nuestro encuentro, en medio de un recital, descubre la historia que quería escribir y que desde entonces avanzó en la escritura de su novela, a tal punto que pudo enviar un avance a la editora a quién le gustó el rumbo de la historia. También se percibe a ella misma con más energía y alegre y relata con sorpresa que empezó a soñar, “yo me duermo profundamente pero nunca sueño”, habla sobre sus esos sueños en los que se encuentra de viaje llenos de movimiento y colores brillantes en los que se siente feliz y disfrutando.
Mejoró su rendimiento en el ámbito laboral, y las tareas que se le hacían engorrosas como escribir los informes de pacientes, ahora puede realizarlas sin estresarse. Respecto a la discalculia refiere notarse más ágil al realizar cuentas.
Su gesto es distendido, dice sentirse liviana y todo su cuerpo responde a ese decir con soltura y fluidez.
Al mes de ese encuentro vuelve a comunicarse para contarme que pudo terminar su novela, justo a tiempo para presentarla en un concurso. Escritura inaugural de una nueva vida en la que deja de destinar esfuerzos en adaptarse para empezar a disfrutar.