Francamente, solo puedo decir que el curso superó mis expectativas. Lo viví como una experiencia profundamente bella de aprendizaje, basada en un abordaje amable, respetuoso y lleno de contención. Una contención que invita sin presionar, a explorar y reconectarte con herramientas propias que muchas veces olvidamos que tenemos.
Durante el curso tuve la oportunidad de conocer diversas técnicas, todas ellas muy versátiles, accesibles y fáciles tanto de aprender como de aplicar. Me sorprendió la claridad con la que fueron transmitidas y lo potentes que pueden resultar en nuestro trabajo terapéutico.
Estoy profundamente agradecida de Susana, quien compartió su conocimiento desde un lugar muy amoroso y generoso. Se nota que enseña desde la experiencia, el compromiso y el corazón.
Sin duda, fue una experiencia enriquecedora que recomiendo de todo corazón.